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La broma del youtuber con gas pimienta es falsa | VIDEO


Hace pocos días publicábamos en esta página un reciente video publicado en un canal de Youtube sobre la broma pesada de un usuario hacia un repartidor de pizzas. Este video tomaba cierta importancia al tratarse de una humillación hacia un trabajador por encima de desear colateralmente darle difusión (que no fama) a dicho youtuber. Humillar a un trabajador e insultarle me hace hervir la sangre, por lo que decidí a hablar de ello.

El video subido a nuestro artículo, no se reproducía desde su canal, sino desde nuestro tweet publicado, por lo que no le dábamos ni visitas ni ingresos. Ni pensaba embeber su video en nuestra página para darle un solo céntimo.
Esta semana, bajo una sospecha que no advertí, he seguido con atención como otros expertos han investigado más a fondo en el canal del youtuber, tiempo que yo obviamente no quise emplear.

Pepo Jimenez, periodista en Vozpopuli.com, observó como existían dos videos prácticamente iguales con la misma broma, por lo que realzaba aún más la idea de que el youtuber había ensayado esta broma o bien todo esto es un montaje. Los pasos y los movimientos son casi iguales. Vean el vídeo.


Además, otros detalles observados por la cuenta @malditobulo evidencian como el repartidor no es de la cadena de pizzerías Dominos, como nombra el youtuber nombra, ni la caja, ni la vestimenta, ni el zapato usado por el repartidor es el reglamentario. Tampoco existe denuncia alguna en Málaga (lugar de residencia del youtuber) de ninguna persona trabajadora de esa cadena, cosa rara, recordemos que existían dos videos. ¿Dos bromas a dos trabajadores y ninguno denuncia?

En algunos medios notificaron que la policía ha investigado el caso  y no ha visto delito, que no puede ser menos que debido a la falsedad del mismo.

La agresión y humillación a trabajadores me toca la fibra. Todos podemos estar de acuerdo en que la difusión de este tipo de video lo único que permite es dar fama al bromista. Pero la cosa es distinta cuando valoras que con tal de no dar fama a un bromista hemos de callar y no denunciar públicamente estos actos. De no haber sido esta broma recogida por usuarios de la red que la han movido, la policía tampoco la hubiera investigado.

El youtuber se habrá hartado de reír, nos ha enfurecido con una broma más pensada en los usuarios que en el propio repartidor. Todo es falso. No es cierto que sea un miserable por hacer esa broma a un trabajador. Se ha quedado con todos nosotros. Pero una vez restada la parte ética de todo esto ¿de verdad es tan gracioso lo que ha hecho? ¿Le merecía la pena hacer esta video-broma para ser recordado como el tonto que nos hizo creer que puteaba a un repartidor? No tuvo gracia antes, ni me da la risa ahora.

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